viernes, 23 de mayo de 2008

Un poco de fútbol

Hay grandes equipos. Hay malos equipos. Hay equipos que funcionan. Hay equipos que no funcionan.

Hay varias formas de plantearse como uno quiere a un equipo.
Hoy tengo dos:

-Modo efectista: El hoy es lo que importa. Todo lo que hagamos, digamos, etc. etc, esta gobernado por un objetivo final: ganar. Esto es Simeone. Esto es Cagna (al menos esto fue Tigre en el Apertura). Esto es Falcioni.
A este planteo se le debe exigir unicamente resultados. Porque persigue unicamente ese objetivo. Ganar hoy.
No suele formar grandes equipos este tipo de planteo. Pero puede lograr resultados instantaneos. Es como una especie de pastilla para adelgazar. Buenos resultados. Hay que ver si para el futuro sigue sirviendo.

-Modo soñador: Tiene una idea de juego. La respeta. Cree en ella. Por más que los resultados no se den, tiene la convicción de que esa idea de juego es fuerte. Insiste (o no, y de aquí se desprenden los grandes fracasos: técnicos que sustituyen sus convicciones), este tipo de proyectos no suelen durar demasiado, a menos que se den rápidamente los resultados. O que nos encontremos ante dirigentes serios. La paciencia suele ser poca.
Esto es Bielsa. Esto es La Volpe. Esto es Cabrero.
Con el tiempo pueden formar grandes equipos.


Dos formas de ver el manejo de la temporada. Distintas aspiraciones.
Unos buscan resultados. Otros buscan formar identidades.

Acá llegan las responsabilidades de los dirigentes de elegir técnicos adecuados, en el momento adecuado.

Dime que necesitas, y te dire que técnico te conviene.

El ya por y para el después

Y al final, ¿qué es lo qué importa?.

¿Por qué la gente se la pasa sacando fotos cuándo pasan cosas extraordinarias?

Digo, ¿a qué juego juega la gente? ¿qué es lo qué busca? En la ciudad nevó. Y todos tienen su filmación. Para que todos veamos lo bien que la pasaron.

Eso es una foto ¿no?. Sonrían para la foto.

Cheese.
Whisky.

Basta de fingir.

Vivimos para 'contarselo a los muchachos'.

Nada de Carpe Diem.

Nace una nueva forma de vida: vivir para contarselo a los muchachos.
Pongale un nombre comercial.

Enjoy the future. Not the moment.

Algo grande

... A veces la vida exige un cambio. Una transición. Como las estaciones.
Nuestra primavera fue maravillosa, pero el verano terminó, y dejamos pasar nuestro otoño.
Y ahora, de repente, hace frío. Tanto frío que todo se congela.
Nuestro amor se durmió, y la nieve lo tomó por sorpresa.
Y si te duermes en la nieve, no sientes venir la muerte. ...

No va dedicado a nadie.
No se porque lo aclaro.
Solo son palabras. No son mias. Son sacadas del inicio de uno de los 18 cortos de la película Paris je t' aime.

Me pareció algo sencillamente grandioso. Y lo grandioso compartido pasa a ser grande.